Wagner Vargas: otro músico costarricense entre sombras
Empezó a presentarse en los bares cuando tenía 20 años , hoy, con menos pelo y tres discos después, aún camina incierto con su guitarra en al espalda mientras piensa "¿cómo le voy a hacer?".
El precio que ha tenido que pagar para vivir de la música es caro: dedicar gran parte de sus conciertos a música ajena..

Imagen obtenida de la galería personal de Wagner Vargas
"He estado a punto de "suicidar" a Wagner Vargas, el que ha hecho covers por muchos años, y que naciera un Wagner 100% original. Si lo hago en este momento de mi carrera pues tendría que poneme a lavar carros o una venta de frutas", comentó Wagner Vargas.
El músico, cuando es cantautor y su trabajo no está basado en mercadeo, vive muchas veces de su silencio, sus emociones callan y adoptan las voces de otros artistas.
Ya lo expresa María Pretiz en su canción “El día que me quieras”: "Y si había entre su repertorio una palabra propia, y ganas de cantarla, que pasó tres noches traduciendo del alma al papel y luego a la guitarra, esta noche escoge no exponerse, que cuando lo intentó, fue como tocar fondo, que la mesa diez lo interrumpió gritando a coro "Cante la del Unicornio"
Video “El día que me Quieras” de María Pretiz
La responsabilidad se divide, mayormente, entre la cultura musical y los escenarios para presentaciones musicales. Para varios músicos, entre ellos Wagner Vargas, los principales responsables son los medios de comunicación.
“En Costa Rica las emisoras están colonizadas.”
En Venezuela, por ejemplo, en la década de los 80´s se firmó el decreto conocido como 1x1, que exigía a las emisoras de radio difundir una canción de un artista nacional por cada canción extranjera trasmitida. Durante esa época surgieron músicos como Franco De Vita y Ricardo Montaner.
"Acá ninguna emisora está obligada a poner ni siquiera una canción por día de un artista nacional. Las freecuencias son del Estado y se pagan una cosa ridícula por usarlas. Se sabe que las discográficas pagan a las emisoras para que pongan su música, y eso es un secreto a voces pero se sabe.", lamenta Vargas.

Foto tomada del bol 89decibeles. Radio Nacional es la única emisora costarricense con una programación 100% costarricense
En Costa Rica los bares no son estadios ni teatros, sin embargo muchas veces son los únicos lugares donde se puede tocar música. Lo primero que pasa en una contratación, generalmente, es que el encargado de algún bar llama al músico y le pida que toque. El músico acepta y se ponen de acuerdo con el monto que se va a pagar por la presentación. Si al música le va bien se va a poder aspirar a un 60% del porcentaje de las entradas. Para salvar su presentación lo peor que puede decir un músico es " yo solo quiero tocar mi música". Ahí todo se cae.
Los estadios y teatros, pese a que estos últimos pareciera tener como objetivo difundir el arte, ni siquiera entran en discusión. Sin patrocinadores es casi imposible que un cantautor pueda presentarse en uno de ellos.
"Si uno tiene el dinero puede hacerlo. Pero un Melico anda más del millón. Abriste el telón y ya debés un millón de colones. Llegue o no gente. No hay ningún beneficio ni preferencia hacia el artista nacional.", explica Vargas.

Wagner Vargas tocando en México. Imagen obtenida de la galería personal de Wagner.

